Muchas veces me enamoro del algún libro leído por pura casualidad del destino, es cuando con todas mis ganas, hablo de él con alguien cercano. Y entonces ese alguien cercano (sin tener gustos parecidos a los míos) me escucha por pura responsabilidad, esperando a su vez, que como buena amiga me tome el tiempo para leer algo que le haya gustado. No tengo ni idea si me explique bien, pero la cuestión es que así fue como leí The fault in our stars de John Green. Resulta que hace poco tuve una crisis de papel, es decir devoraba cualquier libro que tuviese cerca, hablaba de ellos fastidiosamente a una amiga y ella me recomendaba sus libros, me hizo una especial énfasis en éste, y bueno ¿quién soy para no leerlo?
Contiene Spoiler
La historia se centra en Hazel una jovencita de 16 años con cáncer que se enamora estando prácticamente moribunda de otro paciente con cáncer llamado Augustus casi de su misma edad. La cosas suena a cliché romántico acabado en tragedia, pero lo que lo hace interesante es la actitud de la protagonista (el libro es relatado en primera persona por Hazel), ella está segura de que va a morir, no sabe si hoy o mañana pero va a morir, sin embargo, se apoya un poco en no querer hacer sufrir a sus padres, porque según nuestra prota:
"Hay algo peor que tener cáncer y es tener un hijo con cáncer..."
Todo cambia cuando conoce al "galán" de la historia, que ciertamente tiene rasgos de chico malo no obstante, Green nos lo supo presentar en una forma tan especial, tan así que termina gustándote un millón de veces más que la protagonista. Los chicos se enamoran en una relación trió: Hazel-Cáncer-Augustus, poco a poco se conocen detalles de los personajes principales. Uno de los principales pilares del libro es el deseo de Hazel por conocer (antes de morir) a su escritor favorito, Augustus le concede el deseo como prueba de amor y todo para que al final, el alabado escritor fuese un alcohólico que para rematar ni al final del libro se arrepiente de ser tan despreciable con una de sus más fervientes fanáticas.
Y para finalizar (obviamente pasan cientos de cosas más), en nuestro adorado Augustus reaparece el cáncer, ese que supuestamente se iba a llevar primero a Hazel, la agonía es cuanto menos dolorosa, los detalles y sentimientos alrededor del personaje. Se crea un debate casi existencial y concluyendo lo que todo sabíamos (o por lo menos yo me lo predecía) Augustus muere y se deja un final abierto, no sabemos si Hazel vive mucho o poco, sólo sabemos que vivió uno de esos amores de película.
Si tendría que destacar mi parte favorita, esa fue la del pre-funeral, resulta que Augustus quería supervisar todo lo que dijesen en su funeral y así su mejer amigo, su novia y él se despiden. En ese punto supe que el libro se había acabado, aunque confieso que me hubiese gustado más que Hazel muriese y quedase vivo Augustus, lo siento ¿demasiado típico en una lectora femenina cierto? El libro ha sido un éxito total, tanto que la Fox ya compro los derechos, y ya me imagino a una cantidad enorme de adolescentes haciendo fila en su estreno, tal vez este yo ahí con la amiga que me recomendó el libro ¿pues por qué no?
8/10
No hay comentarios:
Publicar un comentario