Uso lentes con bastante aumento, mucho según cada persona que me ha preguntado a lo largo de mi vida. Han sido un buen número la verdad. Desde pequeña sé que se siente el usar gafas, son un complemento infaltable de mi vida, y no estoy exagerando al decir que sin ellos no podría salir de mi casa.
Afortunadamente la miopía no es un defecto poco común y tampoco es peligrosa, sin embargo, hay cierto tipo de situaciones que todos aquellos que usamos lentes hemos experimentado. A continuación dejaré una lista de las que me han pasado, y estoy segura de que ustedes (los cuatro ojos de la vida) también:
- Ir a playas, piscinas, ríos y tener que estar casi ciego mientras estás en el agua por no querer perder las gafas o dañarlas.
- Que alguien se ponga tus lentes y te diga "¡Oh estás tan ciegooooo!
- Quedarte dormido con lo lentes, y ese mini infarto que te da cuando despiertas boca abajo con los lentes en una peligrosa posición.
- Tener que sentarte en los primeros puestos del aula de clases por no ver bien la pizarra.
- Si los usas desde pequeño (como es mi caso), te viste sometido al gusto de tus padres en cuestión de monturas... sabes de lo que hablo.
- También los sobrenombres de toda la vida que le duelen a cualquier niño.
- Desear ver una película en 3D y lo super incómodo que es colocarte los lentes 3D sobre tus lentes.
- Y ni hablar del dolor de cabeza que eso provoca.
- Cuando las personas con una perfecta visión usan lentes sin graduación porque es "cool" (sé que cada quien puede usar lo que quiera pero es tan frustrante que las usen por moda y tú por mala suerte de la genética) .
- Que te saluden de lejos pero ignorar a la persona por no saber si es contigo. O por el contrario...
- Si tienes mucho de aumento, te verás en la obligación de dejar atrás las monturas aéreas o semi aéreas e irte por las de pasta.
- Tomar una bebida caliente y que se te empañen los cristales por completo.
- Algo parecido pasa con el aire acondicionado.
- Cuando está lloviendo, no tienes paraguas ni estás bajo un techo y esas gotitas tan amigables que te impiden ver bien.
- No poder usar lentes de sol.
- La terrible molestia de cuando el lente de contacto te empieza a picar y pestañeas y pestañeas.
- Ni hablar de cuando no te lo puedes sacar.
- Trotar o hacer cualquier ejercicio y que se te bajen o caigan los lentes.
- Caminar con suma lentitud cuando andas sin ellos.
- Que lo primero que hagas en la mañana sea colocarte los lentes.
- Limpiar los cristales equivale a ver las cosas más brillantes, definidas, como si cada limpiada los convirtiera en lente especiales con HD.
- Para las mujeres que no usan de contacto la misión imposible de delinearte los ojos, o sacarte las cejas.
- Perder un lente de contacto en plena calle, no traer alguno de repuesto.
- Que te pregunten a cada rato que por qué no te operas.
- "Achinar" los ojos para poder ver aunque sea un poco cuando no tienes puestas las gafas.
- El pánico de la primera vez que usaste lentes de contacto.
¿Saben de otra?
Nuestros lentes son una posesión material muy valiosa, realmente valiosa, un par de ellos de buena calidad y adecuados a tus necesidades te harán sentir mucho más cómodo en definitiva. Es por ello que debemos cuidarlos en extremo. Gracias a Positiva Club (para hacer educativa la cosa vale) les traigo 8 trucos para quienes usan lentes.
Cómo limpiar los lentes: Lo mejor para limpiar las gafas es agua y jabón. El agua debe ser fría porque el calor estropea las láminas anti-reflejo; y el jabón, neutro porque ciertas sustancias quitan el brillo al acetato.
Secar con el tejido apropiado: Usualmente quien usa gafas las limpia o seca vigorosamente, pues cualquier rastro de suciedad es molesto. Para evitarlo, usa telas duras de algodón o lienzo, de textura de sábana antigua, que dejan poco o ningún vestigio de suciedad. La gamuza que regala el fabricante tiene partidarios y detractores; en cualquier caso, es buena porque no raya. Evita usar papel higiénico o las servilletas de papel, que pueden provocar raspones.
Quitar correctamente: Usa las dos manos para quitarlas, pues se mantendrán alineadas por más tiempo. Especialistas recomiendan, además, comprar lentes que tengan flex, un muelle que hace que los lentes se ajusten y adapten a la forma de nuestra cara.
Una buena protección: El estuche de tus gafas no es sólo un accesorio bonito, sirve para protegerlas. Aunque las fundas rígidas ocupan más espacio, son las mejores para proteger tus lentes de accidentes.
Toma medidas de precaución: En la parte interior de las patas de tus lentes y en el estuche deja una marca con algún esmalte fosforescente para encontrarlas más fácilmente en la oscuridad.
Haz controles periódicos: Una vez al año revisa tus lentes. El personal óptico comprobará si necesitan un alineado, si hay que apretar los tornillos y el estado de los cristales. Solicita, además, una limpieza a fondo, con aparatos de alta frecuencia, que remueven toda la suciedad, incluso en el bisel de la gafa, donde uno no acostumbra a llegar.
Trucos de visión: Si no tienes a la mano tus lentes, pero requieres ver algo lejano de manera urgente, un truco es cerrar la mano formando un puño, abrirla un poco a modo de catalejo y mirar a través del agujero. Al formar ese pequeño hueco, la luz llega en una sola dirección y permite al cerebro formar una imagen nítida.
También debes saberlo: Aunque parecieran detalles sin importancia, hay momentos en que debes proteger tus lentes. Por ejemplo, al cocinar, pequeñas gotitas de humo grasiento se pueden pegar en los cristales, por lo que debes encender la campana extractora cuando cocines. Además, si estás en un sauna o algún espacio que emita calor, no uses tus lentes. Las altas temperaturas deforman las gafas, separando las varillas y expandiendo el frontal. Finalmente, en días lluviosos evita empeorar tu visión y antes de si quiera poner un pie fuera usa algo que proteja tu vista: sombrero, gorra o paraguas.
Yo he de usar gafas o lentillas y la verdad es que todos esos consejos son muy útiles.
ResponderEliminarMás de la mitad de las personas que conozco las usan, así que bien que te sean útiles :D
EliminarHola!
ResponderEliminarMe ha hecho gracia tu entrada, yo no llevo gafas desde pequeña, más bien desde el instituto o así pero he sufrido muchas de esas cosas jajaja. Yo añadiría lo horrible que es entrar en un sitio en invierno y estar un par de minutos sin ver nada hasta que se quita lo empañado, y también el hecho de que las gafas de pasta nunca quedan perfectamente limpias -.-
Besitos
En Venezuela no hay invierno así que no es una situación que me ocurra muchas veces pero es comparable a cuando estás en un auto pegada del aire acondicionado y cuando sales ¡pum! ciego jaja.
EliminarLo de lo lentes de pasta es taaan cierto.
Abrazos.
¡Hola!
ResponderEliminarYo me acuerdo que cuando empecé a usar gafas las veía muy incomodas y no quería llevarlas, pero al cabo de un tiempo logras acostumbrarte. Después de 9 años llevando gafas la verdad es que ahora no me molestan para nada, ni si quiera noto que las llevo puestas. Bueno, eso cuando no hago nada en especial, porque como dices, cuando tienes que ir a hacer deporte, o se pone a llover, ahí si que ya molesta un poco-bastante, sobretodo cuando tienes que ir a la piscina, porque bueno, si es correr y todo eso ya no hay tanto problema.
Creo que uno de los momentos que más me molesta llevar gafas en mi caso es cuando quiero hacerme un cosplay y el personaje no tiene gafas. Me acuerdo que un día fui al salón del manga sin gafas y no veía prácticamente nada, y me daba algo de rabia, porque claro, yo no uso lentillas (tengo los ojos bastante sensibles y tengo miedo a llevarlas) así que en esas situaciones molesta mucho y deseas poder ver bien.
¡Saludos! gracias por los consejos :)
7 años es mucho, yo llevo 14 años e imagínate que ni noto que los llevo puestos de la costumbre. Una vez me meti en la playa con los lentes, de tonta los moje y los cristales se pelaron. Aprendía la lección, mejor ir de casi ciega por ahí.
EliminarTe entiendo a la perfección. No hago cosplay pero hago teatro, y ciertos personajes no llevan gafas. Así que es incómodo porque deseas ser alguien más que no usa anteojos.
Si tienes miedo de llevar lentes de contacto y no los has usado, deberías probarlos aunque sea una vez. Si sí los has probado y no te sientan bien, pues ahí nada se puede hacer que compredo lo fastidiosos que pueden ser gracias a un mal día.
Abrazos :D